Para sacar un mayor provecho a la trufa y a su intenso aroma, una vez que tenemos la trufa fresca la podemos guardar con huevos, tapar bien el recipiente y guardar dentro del refrigerador de 2 a 3 días.
De esta forma el aroma y sabor de la trufa se traspasa al huevo con mayor intensidad y al cocinarlos simplemente le rallas un poco de trufa encima para coronar y decorar el plato.
¡Es un proceso simple y mágico!
De esta forma el aroma y sabor de la trufa se traspasa al huevo con mayor intensidad y al cocinarlos simplemente le rallas un poco de trufa encima para coronar y decorar el plato.
¡Es un proceso simple y mágico!